Cuantos recuerdos vienen a mi mente cada vez que escucho la palabra “cumpleaños de quince”. Las primeras salidas, los primeros besos, las primeras veces que te acostás cuando sale el sol. Pero no todo es exquisito.
A continuación paso a detallar el comportamiento, la actitud, las cosas que debemos hacer y las que no.

La indumentaria: Debemos adecuarnos al ambiente social, al clima y la moda de turno. Existen tres estilos permitidos: formal, sport e informal.
La vestimenta formal nunca pasa de moda. Pero hay que tener mucho cuidado. No atentar contra el buen gusto: 1.- Esta definitivamente prohibido usar chaleco de cualquier tipo, sobre todo los satinados. 2.- Las corbatas ridículas con motivos de dibujos animados (yo personalmente no le veo el glamour a las corbatas por eso directamente no las utilizo).
Otra cosa a destacar para mantener la diferencia entre lo “bien” de lo “pardo” es el calzado. Si te vestís formal no te pongas championes. Si sos una chica usa sandalias, tacos, etc., pero bajo ningún concepto te los saques!!!

La entrada: Glamourosamente tarde!!! Mirada profunda, con actitud ganadora. Lo primero que hay que hacer es firmar el hermoso cuadro con la foto de la chica del cumpleaños. Limitarse a escribir lo justo y necesario, nada de escribir una carta excesivamente extensa. A continuación ubicar a la quinceañera y felicitarla y elogiarla por tan maravillosa fiesta, terminando agradeciendo por estar invitado. (Nota: esto también es para los que no están invitados, nada mas glamoroso…)
Esta totalmente “bien” tener una mesa asignada, pero sino, es muy importante conseguir una con buena disposición, alcohólicamente hablando. Se conversa con el mozo apenas se ingresa a la ceremonia, y se estipula una suma de dinero para asegurarse de recibir la dosis justa de bebidas y tragos varios. (Nota: esto es innecesario si estamos en una mesa “VIP” o de mayores.
A tener en cuenta las siguientes dos reglas aplicables a cualquier evento del estilo: 1.- Siempre tener un vaso. 2.- Siempre lleno.

Desarrollo de la fiesta: Mantener siempre la indumentaria con la cual ingresamos a la misma. Divertirse sanamente, bailando, si se quiere, sin realizar movimientos ridículos, pasos grupales o sincronizados. Esto último es aberrante, totalmente “pardo”.
En caso de estar con alguien recordar que mucha gente puede estar observándonos, esto implica que debemos mantener una conducta correcta. Que quiero decir con esto? Si estas con una chica no le toques el culo o las tetas, besos dulces y sin lengua. Si realmente deseamos realizar alguna de estas cosas recordemos que existen otros lugares de menor exhibición.

El Ágape (la comida para los que no saben lo que es): No se come!!! Solamente se mira y se critica objetivamente. Odiamos a las personas que engulle y traga sin masticar solamente por que es gratis.
Lo único que se puede ingerir es un café y una media luna (de desayuno). Existe una excepción: si tenemos demasiada hambre lo que podemos hacer es una degustación, esto significa probar algo muy sutilmente.
Con respecto al menú del cumpleaños hay tres cosas que son totalmente “pardas”: pizza, sándwich y chizitos. Lo demás esta “bien”.

Distribución de las bebidas alcohólicas: Están vetadas. Para algo arreglamos previamente con el mozo. Aborrezco a las personas que se avalanchas por un fucking vaso de cerveza caliente sin presión. En este punto también existe una excepción: el champagne acompañado de las infaltables canciones cursis de todos los cumpleaños a la hora del brindis. Eh aquí el momento para degustar una copa y festejar con la chica de la noche y hacer pesar nuestra condición de poder, para sacarnos una foto con la quinceañera. Este también es un momento para reírse de todos los familiares ebrios que hacen papelones, y ahora con las luces encendidas las podemos apreciar con claridad.

La despedida: Es clave no retirarse por ultimo. Ir a ropería (sin hacer colas) sacar las prendas allí alojadas, y agradecer una vez mas a la homenajeada de la noche. (Nota: no se roben nada es de “pardo”, yo antes lo hacia, esta mal).

Gracias Martín Revoira Lynch por instruirme sobre lo que esta “bien”.